Dentro de cada país se han creado diferentes instituciones que cumplen la función de supervisar los precios de la canasta familiar y cómo se desarrollan los mercados. En el caso específico de México, esta institución se llama PROFECO, cuyas siglas se refieren a la Procuraduría Federal del Consumidor y su función principal es la de promover y proteger los derechos e intereses del consumidor, así como procurar equidad y seguridad jurídica en las relaciones entre proveedores y consumidores.
Bajo esta premisa se entiende que la entidad deberá encontrar las formas de establecer y mantener comunicación asertiva, activa y constante con los consumidores.
Respuestas de voz útiles pero susceptibles de mejora
Por lo general, este tipo de instituciones han desarrollado portafolios comunicativos que incluyen diferentes opciones como servicios de respuesta de voz interactiva, servicios de chat o chat bots automatizados.
Si bien estos servicios son funcionales y pueden guiar a los usuarios en la búsqueda de información, probablemente no son tan efectivos como un servicio de marcación rápida.
Al tratarse de una institución como PROFECO que se encarga de mediar entre los consumidores de un producto o servicio y los proveedores del mismo, la gama se hace muy amplia, puede haber miles de áreas comerciales asociadas y por ende muchas inquietudes que resolver.
Para optimizar los tiempos de comunicación y sobre todo la experiencia del consumidor, PROFECO podría optar por establecer alianzas con un especialista en números cortos que se encargue de establecer un servicio de marcación corta.
¿En qué se diferencia la marcación corta de la regular?
Un número corto es, como su nombre lo indica, un número de teléfono que consta de muy pocos dígitos, apenas cuatro para ser exactos y a través del cuál los usuarios se pueden comunicar rápidamente con una institución como PROFECO. Este número es algo similar al ✱3636 y puede ser marcado desde cualquier teléfono celular facilitando aún más su alcance.
Estas marcaciones cortas funcionan de manera muy sencilla, los consumidores no deben aprenderse números largos y complicados. Lo anterior de por sí, es ya un gesto amable con el consumidor porque le facilita el acceso, haciéndolo rápido y sencillo.
Ahora bien, es importante resaltar que los beneficios del uso de una marcación corta no se limitan al consumidor, también las entidades resultan beneficiadas al establecer una marcación única para cada tipo de servicio.
Una entidad que hace las veces de vigilante y mediador, protegiendo los derechos del consumidor no solamente podrá ser accesible y reconocida por innovar sus formas de comunicación sino que internamente organizará y encauzará mucho mejor la recepción de quejas, inquietudes o sugerencias